El pasado 29 de Noviembre viajé a Colonia (Alemania) en representación de los compositores de Musimagen con motivo del congreso de música de cine "Soundtrack_Cologne". En su cuarta edición, una de las novedades era el "Soundtrack_NEXT", donde compositores jóvenes de varios países europeos (Francia, Alemania, Holanda, Suiza, Inglaterra, Suecia y España) nos presentábamos ante el público y la industria europea. En dicha presentación cada compositor era entrevistado por un periodista y, posteriormente se proyectaba un "showreel" con algunos de sus mejores trabajos. Sinceramente, esperaba más nivel. Exceptuando el francés y algún destello más, el resto no parecía aportar nada que llamara la atención por su calidad u originalidad.
El día siguiente estaba invitado a dar una conferencia en el "European University Meeting", donde algunas de las escuelas y universidades europeas dedicadas a la enseñanza de la música de cine presentábamos nuestros programas de estudios. Uno de los invitados al "meeting" era ni más ni menos que Gabriel Yared ("El Paciente Inglés", "El talento de Mr. Ripley"). En mi presentación pude explicar el trabajo que desarrollo en el Real Conservatorio de Música de Madrid en los últimos cinco años. Posteriormente proyecté un vídeo de 25 minutos con algunos de los mejores trabajos de mis alumnos. Sinceramente, causamos una gran impresión, y es que, para sorpresa mía, el nivel de la enseñanza en Europa de la música de cine no es tan alto como se podía pensar. Realmente nosotros les damos cien vueltas... Al finalizar mi presentación llovían preguntas: no podían entender cómo podíamos realizar tan gran cantidad de trabajos, de diversos medios y géneros (publicidad, documental, vídeo-arte, vídeo-danza, cortometrajes, largometrajes...) con tan buen resultado y empleando no sólo los medios informáticos, sino también los grupos instrumentales (música de cámara, orquesta, banda sinfónica, etc.). Alumnos procedentes de Alemania, incluso de E.E.U.U. o Reino Unido quedaron bien impresionados, hasta tal punto que alguno de ellos pretende venir a Madrid a estudiar al Conservatorio.
En fin, tras esta experiencia he reflexionado en el sentido de que hemos de pensar que en España el nivel de la música de cine es bastante alto, en contra de lo que muchas veces pensamos nosotros mismos. A veces se cree que en Europa se encuentra más nivel en todo, y esto no es necesariamente así en todos los casos; aquí hay buen nivel, y esta experiencia es una prueba de ello.
El domingo día 2 regresé a Madrid satisfecho, con la impresión de que en España no tendremos facilidades para hacer las cosas, pero nosotros buscamos la forma de hacer que funcionen de la mejor manera posible. Finalmente, el resultado es lo que cuenta.
